Esto no es una novela ni un libro de autoayuda, sino un «café con leche» en palabras de su autor. ¡Pasen y lean!
El día empieza con el acostumbrado y rutinario trasiego
de la farmacia, colocando los medicamentos recién llegados en un mundo de cajones y estanterías.
Una caja de paracetamol resbala de las manos de mi
compañera y cae al suelo. “Alguien está pensando en
mí”, dice. La miro con desdén y no puedo evitar replicarle que eso es tan pretencioso como estúpido y que
sólo esconde una realidad: “eres torpe”. Mi compañera
me devuelve una mirada de indignación y suelta un “gilipollas” de camino al lavabo. Sé qué es esto en lo que vivo.
Ese estado que alguien decidió distinguir con una exótica palabra, burnout, y que se me ha comido entero. Vivo
en él y lo impregna todo. Abandonado a una existencia
que no me pertenece e incapaz de transformarla.
Qué caprichosa puede ser la vida cuando esta que, pareciera haberse convertido en tediosa rutina, de repente
pide que te vuelvas a reinventar; a revisar lo que uno
pudo ser, o fue, y a curar las heridas de lo que ahora es,
mientras te suelta una buena bocanada de culpa.
Con un discurso mordaz y burlón, diario de un dolor de tarde de domingo no es más que una pretendida
excusa, una crónica petarda que acompaña el proceso
de hilvanar una nueva existencia. Este, es el diario de un
dolor latente; que consiguió adormecerse, contenido, y
que ahora vuelve a recuperar todas esas tardes de domingo en las que quiso desaparecer.
Me llamo Toni Marcilla y tengo una edad,
digamos que… indeterminada. La lectura
me salvó de todo lo que me rodeaba y lo
sigue haciendo. La escritura, me ha salvado
de mí mismo. Soy Trabajador Social, aunque casi toda mi vida laboral ha transcurrido detrás del mostrador de una farmacia.
El que pretende ser mi libro habla, entre
otras muchas cosas, de la pérdida y del duelo. Nace hace dos años, tras la experiencia
a partir del acompañamiento de un Grupo
de Ayuda Mutua dirigido a personas que
perdieron a algún familiar. Nace de la necesidad de poder hablar de ello, del desconsuelo, sin casi darte cuenta. Nace de mi necesidad de escribir que canalizo a través de
la participación en concursos de escritura,
microrrelatos o en mis colaboraciones en
el periòdic independent malarrassa. Nace de mi
necesidad de leer y compartir lo sentido en
el grupo de lectura en el que participo desde hace tantos años. Creo que, lo que ahora
tienes en tus manos, es un buen sitio para
contener mis palabras; para asentarlas y darles vida. Espero que pases un rato divertido
con ellas. Igual, incluso, te ofrezcan el poder hacerte alguna que otra pregunta. Si es
así, gracias por dejar que trasciendan en ti|
La editorial
Comunicación
Redes sociales
|
Distribución
Derechos
Envío de originales
Tienda
|
Nuestros sellos editoriales
|
Mascarón de Proa Parque Logístico de Córdoba
Ctra. Palma del Río, km 4 C/8, Nave L2, módulos 6-7, buzón 3 14005 - Córdoba (+34) 957 467 081 FAX: (+34) 957 227 819 | ||